Celibato en el matrimonio



El título hace referencia a "matrimonio" para darle un parámetro, rol o nombre a una relación especial de pareja con una actividad sexual y emocional que fue activa desde hace ya algunos años pero que por alguna razón ha dejado de ser así, ¿quieres saber la razón? 

Te invito a seguir leyendo el artículo.

Conoces a alguien especial, te cautiva de maneras que escapan a tu lógica, empiezas a entender de manera diferente todas esas comedias románticas que te han parecido ñoñas, absurdas y poco realistas, añoras ser como alguno de los personajes de las novelas que más te gusta leer pero también perfilas a esa persona tan encantadora que ha entrado a tu mundo y comienzas a atribuirle cualidades, características tanto en lo físico como en lo emocional haciéndole similar a esos personajes ficticios. 

Dices que es diferente a todos los demás, y quizás hasta ya haz tenido otras relaciones significantes en tu vida, pero estás seguro que este es incomparable a todo lo real, y quizás por eso solo puede parecerse a ese personaje ficticio que de verdad solo puede salir de novela, cuento o leyendas. El resto de la historia de amor entre ambos tendrá más o menos ingredientes según sus personalidades y aunque estas son importantes pues hablaremos de ellas pronto, el caso es que juntos toman la decisión de vivir juntos y el sexo, sí, el sexo es espectacular, nunca te sentiste tan unido a alguien, eres genuinamente feliz.

Hasta acá todo bien, si tratas de hacer memoria y eres honesto sabrás que sí, esa relación era significativa, pero ahora han pasado ya más de seis meses desde la última vez que tienes intimidad, de hecho salvo las actividades de trabajo o quehaceres que como rutinas aún les unen ya no tienen mayor interacción e impacto en sus vidas, están ya legítimamente vacíos.

La pasión que sintieron el uno por el otro parece que desapareció y hasta declaras que nunca existió, hasta dudan de si alguna vez se amaron o gustaron siquiera, las quejas, los reclamos, reproches y ofensas parecen los lenguajes más habituales, pero, ¿qué les llevó a este escenario tan cruel? Tratemos de definir lo que es la pasión, de esa manera podremos comprender un poco mejor los ingredientes que existían al inicio y que faltan en etapas más maduras de esta relación que aunque ficticia, si haz llegado hasta acá en la lectura probablemente sea más real para tí de lo que desearías aceptar.

La pasión que para fines químicos en realidad se trata de la exposición a altas dosis de hormonas que nos hacen sentir felices, activos, se fusionan entre estados que varían del miedo a la muerte hasta la euforia de la vida, es un acontecimiento tan único por sí mismo que muchos llegan a buscarlo como droga rebotando entre relaciones, aunque ese es tema para otro artículo. Este deseo nace de nuestros sistemas nerviosos y reproductivos que trabajan con el resto de órganos para hacernos saber que esa persona es apta para nuestra reproducción, o al menos para nuestra compañía, entran en juego factores como la simetría, proporciones físicas, facultades mentales, sí, así es, la belleza exterior no solo es una construcción social, llevamos miles de años como humanos y millones de años como seres vivos apelando a la belleza como factor determinante de las facultades idóneas de una especie, pero en nuestro caso también son atractivas otras características menos obvias, como el aliento, el humor, el olor corporal en general, con esta fragancia única en cada ser también transmitimos si somos o no elegibles por estos factores. Como podrán ver hasta este punto para estos requisitos hemos desarrollado potencializadores externos que nos ayudan, desde el maquillage, hasta las cirugías y los perfúmenes más ostentosos para expresar todas estas cualidades de manera sintética, ¿alguna vez se te había ocurrido ver este tipo de procedimientos, algunos de ellos cotidianos como por ejemplo usar desodorate como algo tan crucial para tu relación de pareja? Pero nuestros procesos de selección no terminan ahí, y es que bueno, el pináculo de la creación o evolución, como lo quieran ver, tenía que tener, claro que sí, procesos altamente sofisticados, hemos entrado en el mundo psicológico.

Los seres humanos tenemos sentimientos, es cierto que el resto de especies también presentan algunas de estas como la empatía, lealtad, dolor, amor. Nosotros hemos desarrollado lenguajes emocionales y de comunicación muy sofisticados; el habla y la escritura son más desarrolladas que en ninguna especie, así también nuestros códigos emocionales son complejos. He dejado para el final este ingrediente porque de hecho es quizás el más determinante, ciertamente las de orden físico son claves para establecer los primeros acercamientos, porque por ejemplo, pueda que Jorge guste de acercarse a personas con cierto tipo de cabello, altura o peso y pueda que a Miriam le atraigan las que son de otro tipo étnico. Sin embargo todos compartimos un abanico mucho más amplio y menos evidente de emociones y las expresamos de diversas maneras.

Los polos opuestos se atraen, es una ley de la física, pero ciertamente también podemos decir que no solo se atraen, también se complementan, permiten que existan rotaciones, movimientos, energía, potencia, gravedad y muchas otras reacciones fantásticas que también están en la relación. Veamos esto en el ángulo de los sentimientos, una persona vulnerable, podría verse atraída por aquella que le inspira protección, otra con un emociones indecisas tendría una fuerte atracción por uno más determinado, una persona insegura estará perfecta junto a un controlador, sí, como podrán notar nada de esto es sano en los extremos, pero vamos, es lo que todos somos en un punto de nuestra vida y seguiremos siendo si no decidimos hacer algo al respecto.

Volvamos la mirada con esta información en mente a nuestra pareja que lleva ya muchos meses sin tener intimidad, pero acá otro detalle que no les conté, de hecho no hablamos de intimidad como sexo, la intimidad que en realidad primero les falló y la que nos debe de interesar es la emocional, dejaron de conectar con sus neceidades básicas y por tanto no desearon más a la persona por la que tenían aquella fuerte pasión.

Esto no necesariamente ocurre por situaciones que diríamos malas, quizás la persona insegura ya tiene más seguridad y requiere menos control y el controlador no ve el cambio de manera amigable, así que inician los choques de personalidad, notaremos una creciente falta de la comunicación significativa, lo que quiere decir que siguen hablando, pero no de cosas que en realidad importen, se trata de ese tipo de conversaciones que van más allá de las compras del súpermercado o pagar las cuentas, son aquellos ratos, discusiones y momentos que tenemos con nuestros amigos íntimos, si la cosa va a mal existen episodios de violencia emocional, recordemos que se trata de dos personas que se conocen muy bien y que lastimosamente pueden usar ese conocimiento como un arma. Las heridas son profundas, provocan un distanciamiento aún mayor, quizás a este punto la cordialidad o el temperamento eviten que sea tan notorio, pero se percibe por dejar de hacer aquellas cosas que se hacían para ser amable por el otro pero que ahora ya resultan en una carga.

No existe una única fórmula para poder recuperar una relación en este punto, si crees que necesitas terápia estás en lo correcto, pero para terminar de contarte algunos detalles en este artículo te diré que como pasa con la medicina física, la emocional tiene muchos agentes preventivos, alimentar la relación con una comunicación auténtica, es decir, escuchar de verdad y hablar de verdad, aceptar que no necesariamente nos van a amar de la manera en la que deseamos y lo que quizás sea lo más duro de todo, comprender que nunca nos amarán como al inicio de la relación. Este último concepto suena a que el amor va en decadencia, como quien va tomando agua de un vaso hasta que no queda ni una gota, pero no es así, te explico con un breve ejemplo:

- Cuando tenemos frente a notrosos un bebé o un cachorro, le damos un tipo de amor, pero a medida que va creciendo, dejamos de tratarlo como tal, el alimento que le damos, los cuidados todo va cambiando debido a las circunstancias, el amor es así y aferrarnos a un tipo o manera de amar nos causará daño a nosotros y a la relación en sí misma. 

Nadie quiere tener sexo con un perfecto desconocido, sin que pase al menos por los filtros de atracción física de los que hablamos al inicio, pero en ese caso se trata de tan solo sexo casual, este artículo ha tratado sobre intimidad, hablamos de la necesidad de ser uno con alguien, lo que ha movido a la humanidad a ver la monogamia como una méta, aunque muchas veces utópica y a pelear por derechos de matrimonio, la idea de unirse por fin con alguien. Pero por lo recién explicado debes tomar en cuenta que ese alguien sí puede llegar a ser un desconocido, y entonces nos encontramos con una de las experiencias más duras de la vida cónyugal, descubrir la soledad estando casado. 

Tener a un perfecto desconocido justo a nuestro lado en nuestro dormitorio, cada día, una situación dura y penosa, el celibato en el matrimonio.




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